lunes, 25 de mayo de 2009

Nenúfares, Monet, y cómo flotar en la locura...

"Cuando Monet se construyó un impresionante jardín en su casa de Giverny decidió cultivar en él exóticos nenúfares importados de Japón.

Estos nenúfares adquirirán reconocida fama al ser los protagonistas de los últimos cuadros de Claude quien había planeado revestir una habitación circular con una serie de estas plantas. A pesar de las cataratas que dificultaban su visión, Monet realizó una de las obras más espectaculares que en conjunto recibe la denominación de Capilla Sixtina del Impresionismo..."



"Con la evolución a ultranza del realismo, llega la locura"

Café con Agua.

2 comentarios:

Argax dijo...

Lo que demuestra una vez más que el ser humano no está limitado por sus sentidos. Vemos pero no atendemos, oímos pero dejamos pasar lo que de verdad es significativo.

josef dijo...

Mopnet un gran genio, con una sensibilidad muy por enciama de sus carencias sensitivas. Espléndido post!