lunes, 16 de febrero de 2009

Agua


Abro los ojos, me vuelvo a zambullir.

Comienzo a notar su temperatura, los espasmos que produce… No doy credibilidad, (apareció como de la nada, o tal vez siempre vivió allí) por lo que vuelvo a abrir los ojos para ver su rostro, saber que es real y que tengo un intruso en mi bañera. Revolotea reproduciendo extraños zumbidos que al caer por los azulejos araña la porcelana blanca.
Sonrío mientras le comparo con una gota, y me pide rodar por mis pezones, y romper el río… mientras lo pienso, marco las arritmias que me golpean dentro del estómago:
Mil doscientas
Una,
Mil cuatrocientas
Una más…

Inunda la bañera mi nuevo “alter ego” y le cedo mis espacios vacíos: compartiremos huecos (sin métrica ni intención definida) y viajaremos en coches separados… Enciendo una vela para darle aún más protagonismo y deliro con su aparición, con su creatividad, y con su cuaderno en blanco para llenarlo de historias… Ya está dentro.

Doy a luz por fín… Queda colmada la otra mitad…Ya estás aquí…

Adelante Agua, hoy comienza tu nuevo océano.



Café

4 comentarios:

Óscar Varona dijo...

Pufffff!!!! Qué explosión de letras, imágenes y sentidos que consigues en apenas dos parrafos. Besos.

josef dijo...

Por eso yo nunca me baño, prefiero ducharme, así consigo que mi "alter ego" resbale y desaparezcva por el desagüe. Horas después lo recupero de nuevo . Excelente relato!

Unknown dijo...

el sino,es eso un estigma,
buena temporada.
besos

Jose A. Sencianes Ortega dijo...

luego dices que escribes normalito, vaya tela Nuria... me gusta mucho, y eso que ya sabes que no leo demasiado! Un abrazo desde la marisma